Si hacen bien su trabajo, tanto empresas con responsabilidad social, organizaciones de la sociedad civil y empresas sociales generan impacto. Pero, ¿cuál es más sostenible en el tiempo?, ¿cuál está vinculado a procesos productivos? y ¿cuál genera empleo y encadenamientos que por sí mismo producen un aporte al progreso social? Negociar impacto por recursos permite integrar mercado e impacto para que las empresas sean el centro de la solución para problemas sociales y ambientales.
Las diversas crisis globales, así como las crisis económicas que afectan a los países de América Latina mantienen un importante grupo poblacional excluido de los beneficios del crecimiento económico. Asimismo, los problemas sociales y ambientales crecientes hacen necesaria la acción de grupos sociales para generar un impacto que pueda crear cambios sostenibles en las costumbres de la población y las interacciones humanas para que la vida sea sostenible sobre el planeta.
Tanto instituciones del gobierno, como las organizaciones de la sociedad civil, conocidas como el tercer sector, empresas con responsabilidad social y empresas sociales y otras formas asociativas buscan generar impacto, en mayor o menor medida con mayor o menor éxito.
Las organizaciones de la sociedad civil, en general, nacen a partir de las preocupaciones ciudadanas y buscan captar financiación a partir de la filantropía, el aporte al desarrollo de gobiernos extranjeros o canalizando recursos públicos por medio de su quehacer. Las empresas con responsabilidad social generan su impacto, generalmente, en ámbitos relacionados con su modelo de negocio como forma de aportar a la comunidad en donde se desarrollan sus actividades. Las empresas sociales se caracterizan por haber incluido el impacto social y ambiental en su modelo de negocio y a partir de ello lograr cambios en su entorno ambiental o social.
En el libro “Scaling Strategies for Social Entrepreneurs” de Urs Jäger, Felipe Symmes y Guillermo Cardoza, se presenta una aproximación de mercado que las empresas sociales pueden usar para escalar su impacto. Esta aproximación implica intercambiar impacto social y ambiental positivo por recursos, conectándose con inversionistas de impacto y otras empresas sociales.
El libro hace un recorrido del modelo de impacto y su financiamiento que las tres distintas formas organizativas generan en sus localidades o ámbitos de acción. Muestra con ejemplos y características las diferencias clave entre organizaciones sin fines de lucro, empresas con responsabilidad social y empresas sociales.
Las organizaciones de la sociedad civil o sin fines de lucro generan su financiación principalmente a través de donaciones y subvenciones. Estas organizaciones son principalmente financiadas mediante donaciones, lo que conforma su modelo financiero. Sus operaciones se enfocan en generar impacto social, es decir, mejorar la calidad de vida de sus beneficiarios, y esta es la esencia de su modelo operacional. Según el libro sus “actividades de mercado están bastante limitadas y se usan para aumentar el financiamiento, sin estar directamente vinculadas a la principal misión social de la organización”.
Aproximación de impacto sin fines de lucro
Las empresas con responsabilidad social tienen su funcionamiento como unidades productivas con un modelo de negocio determinado en cualquiera de las áreas productivas o comerciales. Son organizaciones con fines de lucro. Ellas separan el centro de su negocio y el impacto, “abordando los problemas sociales a través de su departamento de Responsabilidad Social Empresarial (SRE), que suele estar separado de la estrategia de negocio y no forma parte de las metas de rentabilidad”. Aportan al impacto de las comunidades donde tienen operaciones pero no es parte central del negocio, sino que destinan partidas específicas destinadas a ello.
Aproximación de mercado con fines de lucro
Las empresas sociales se enfocan, principalmente, en el impacto y la sostenibilidad financiera, en lugar de solamente enfocarse en clientes con capacidad de pago o ventas. Debido a que los emprendedores sociales operan en contextos con importantes desafíos sociales, es común que no puedan generar ingresos suficientes internamente para financiar sus planes de crecimiento. Por esta razón, la mayoría de las empresas sociales necesitan buscar financiamiento externo para poder expandirse. “El intercambio de impacto por los recursos necesarios para escalar es una manera eficaz de procurar financiamiento externo”, indica el libro.
Aproximación de mercado para escalar usado por las empresas sociales
Las diferencias entre organizaciones sin fines de lucro, empresas con responsabilidad social y empresas sociales puede resumirse así.
Organizaciones sin fines de lucro:
- Su objetivo principal es generar impacto social o ambiental positivo en lugar de obtener beneficios económicos.
- Buscan recursos principalmente a través de donaciones, subvenciones y patrocinios, donde intercambian impacto por recursos.
- Su modelo operacional se centra en generar impacto, y las actividades de mercado están limitadas y se utilizan para aumentar el financiamiento sin estar directamente vinculadas a la misión social de la organización.
- No ofrecen un retorno financiero a sus donantes ni reembolsan el capital recibido.
Empresas con Responsabilidad Social:
- Su objetivo principal es maximizar las ganancias económicas para sus accionistas o propietarios.
- Operan bajo un modelo de negocio en el que generan ingresos y beneficios a través de la venta de productos y servicios a clientes que pagan por ellos.
- No tienen la obligación de generar un impacto social o ambiental específico como parte de su modelo de negocio, aunque pueden tener programas de responsabilidad social empresarial (RSE) separados de su estrategia de negocio principal.
Empresas sociales:
- Su objetivo principal es generar impacto social o ambiental positivo al tiempo que buscan la sostenibilidad financiera de su modelo de negocio.
- Utilizan una aproximación de mercado para escalar su impacto, intercambiando impacto por recursos. Se conectan con inversionistas de impacto y empresas sociales para negociar el impacto social y ambiental a cambio de recursos financieros y no financieros.
- El impacto está en el centro de su modelo de negocio, y se centran en problemas sociales o ambientales de interés para los inversionistas de impacto.
- Pueden pagar un retorno económico al inversionista o devolver el capital invertido después de cierto tiempo, pero siempre priorizan el impacto sobre la rentabilidad.
- Vendiendo a clientes con capacidad de pago y beneficiarios, crean modelos de negocio autosuficientes económicamente que les permiten escalar su impacto.
En resumen, las empresas sociales se diferencian de las organizaciones sin fines de lucro y las empresas tradicionales porque su modelo de negocio está centrado tanto en generar impacto social o ambiental como en lograr sostenibilidad financiera. Utilizan una aproximación de mercado para escalar su impacto, negociando el impacto por recursos con inversionistas y otras empresas sociales interesadas en apoyar su misión.
Negociar impacto por recursos
El modelo que presentan Urs Jäger, Felipe Symmes y Guillermo Cardoza en “Scaling strategies for social entrepreneurs” aplica a las empresas sociales porque son las que colocan el impacto en el corazón de su modelo de negocios.