Bolivia fue testigo de un evento trascendental que dejó una huella perdurable en el mundo de la inversión y el emprendimiento. El Foro de Inversión de Impacto en América Latina (VCILAT), celebrado los días 16, 17 y 18 de agosto de 2023 en Santa Cruz, se convirtió en el epicentro de ideas y colaboración, reuniendo a actores clave de toda la región. En este contexto, VIVA Idea se destacó como ponente con su trabajo de co-creación de mercados contextualizados para impulsar el progreso social en las comunidades participantes.
VCILAT se erigió como una importante oportunidad para reunir a una amplia gama de actores bajo un mismo techo. Desde venture capitals hasta fondos de inversión de impacto, pasando por agencias multilaterales como el BID (Banco Interamericano de Desarrollo) y CAF (Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe), empresarios, startups, emprendedores sociales y representantes de organizaciones de la sociedad civil, muchas de ellas enfocadas en temas medioambientales, como Fundesnap, Prometa, FAN y FCBC, se unieron en un esfuerzo conjunto por impulsar el cambio positivo.
El evento fue organizado por la Fundación IES y CAINCO, con el apoyo de la Cooperación Suiza en Bolivia. Uno de los momentos sobresalientes del foro fue un panel moderado por el emprendedor social Manuel Laredo Garnica, fundador de Mamut, que exploró el tema de “Iniciativas Subregionales para el Impacto e Innovación Social con Sentido”. En compañía de Cinthia Varela de Kunan y Álvaro Bronstein Román de Mayma, se debatieron los desafíos y oportunidades que enfrentan las empresas sociales en una época en la que el Estado no siempre puede abordar todas las necesidades. Aquí, la sociedad civil y las empresas sociales desempeñan un papel crucial al desarrollar diversos servicios y productos. La cuestión del acceso al financiamiento, especialmente en áreas rurales, y las alternativas como los bonos verdes fueron temas centrales. Vale la pena destacar que Manuel Laredo ha participado activamente en las actividades de VIVA Idea.
Cristóbal Escalona, director de Balloonlab, de Balloon Latam compartió los logros del portafolio actual, que incluye proyectos como Nanobosques, CLEO y la segunda edición del Fondo de Desarrollo Rural (FDR), realizado en colaboración con Fundación AVINA, una parte integral del ecosistema VIVA, que abarca a VIVA Idea, Fundes, Marviva y Masisa. La repercusión positiva del Fondo de Desarrollo Rural fue tan evidente que se está creando un fondo de 1000 millones de mesocréditos para la comunidad Balloon.
VCILAT tiene como objetivo cerrar las brechas de financiamiento para empresas en sus primeras etapas o consolidadas, especialmente aquellas con base tecnológica y/o un alto impacto social y ambiental, en modalidades de inversión de riesgo y de inversión de impacto. El evento reunió a inversionistas, donantes y emprendedores, es decir, a todos los actores del ecosistema de inversión de impacto. Su misión principal era comprender la realidad actual y las perspectivas futuras de esta forma de inversión.
El VCILAT 2023 concluyó con éxito el pasado viernes 18 de agosto, tras dos intensos días de trabajo en las Torres CAINCO, que congregaron a 455 participantes de 12 países diferentes. Empresarios, emprendedores, financiadores y líderes de startups se unieron a representantes de instituciones de desarrollo para compartir conocimientos y experiencias. La diversidad de países representados, incluyendo Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador, México, Panamá, Paraguay, Perú y el Reino Unido, subraya la relevancia de este foro a nivel internacional.
Destacados emprendedores de América Latina participaron en un panel de discusión sobre el desafío de emprender en contextos complejos. El panel estuvo compuesto por Ezequiel Escobar, fundador de uSound, Juan Carlos Abdala de Kilimo, Patricia Rodríguez Terrazas de Walisuma Artesanía y fue moderado por Corina Marion, Managing Partner en Babasú Ventures.
Los panelistas compartieron sus experiencias y perspectivas sobre el emprendimiento en la región, enfatizando la importancia de superar obstáculos, fomentar la colaboración entre emprendedores y la voluntad de superar barreras geográficas en busca de un futuro más prometedor para la región.
Para Escobar, “todos los que elegimos este hermoso camino de emprender, nos encontramos en contextos poco favorables y solo hace falta tener una charla e intercambiar algunas palabras entre emprendedores para conectarnos y coincidir en lo complejo que se hace en nuestros países. Pero también podemos decir que es posible, es importante y es necesario que más emprendedores de América Latina se animen a emprender y generar valor, que compartamos nuestras experiencias y alineemos esfuerzos para potenciar nuestro ecosistema emprendedor.
Inversión y filantropía de la mano
Un logro destacado del evento fue la convergencia de dos mundos aparentemente dispares en la gestión de capital: el empresarial y el filantrópico. El evento atrajo no solo a organizaciones con un enfoque empresarial, sino también a audiencias que trabajan con capital filantrópico y sostenible. Esta convergencia reveló que ambos mundos comparten objetivos similares: impulsar la innovación social y tecnológica. Esta idea de unión entre ambos mundos ha sido promovida durante más de cuarenta años por el fundador del ecosistema VIVA, Stephan Schmidheiny, quien sostiene que las organizaciones empresariales y las organizaciones de desarrollo pueden colaborar para contribuir a la sostenibilidad.
El VCILAT 2023 consolidó los lazos entre los actores clave en la inversión de impacto. Sirvió como un faro de esperanza y colaboración en un mundo que busca soluciones sostenibles para los desafíos del siglo XXI. Este foro representa un testimonio del progreso que podemos alcanzar cuando trabajamos juntos en pro de un futuro mejor.
Expandiendo la mirada de Inversión
Fernanda Achá, líder de proyectos en VIVA Idea, resaltó que se ha visto la necesidad de cambiar de las instituciones financieras y que se han dado buenos casos de éxito. “El ecosistema ha logrado influir en estas entidades para que expandieran sus servicios hacia nuevas cadenas de valor y a empresas sin historial crediticio previo”. Según Achá, esto resultó esencial porque existían miles de empresas “tradicionales” y PYMEs que anhelaban crecer, pero que no habían encontrado inversores ni aliados estratégicos dispuestos a respaldar sus proyectos. La especialista en emprendimiento social de VIVA Idea reconoció el poder inherente de estas empresas, ya que son fundamentales para el tejido económico local y forman parte del parque empresarial más grande de toda la región.
Sin embargo, Fernanda Achá también subrayó que la transición hacia prácticas regenerativas había requerido financiamiento concesional e incentivos. Esto se debió a tasas de interés más bajas y la eliminación de la necesidad de garantías para acceder a préstamos. Además del financiamiento, Achá argumentó que la asistencia técnica era crucial para respaldar la transición hacia prácticas más sostenibles y regenerativas en el ámbito empresarial. No obstante, enfatizó que el apoyo del ecosistema de inversión no debería centrarse únicamente en una categoría de empresas, generalmente tecnológicas, sino que debería explorar a fondo el tejido social latinoamericano en busca de empresas generadoras de impacto que a menudo operan en lugares menos visibles.
En VIVA Idea, se ha desarrollado un marco integral que aplica lecciones aprendidas para garantizar la inversión en el fortalecimiento de comunidades vulnerables. Este enfoque se basa en un profundo conocimiento del contexto, los actores involucrados y sus relaciones.
Focos de la inversión y aprendizajes
Para José Valverde, director de Conocimiento y ponente destacado en el evento, es fundamental identificar problemas específicos en la región, definir el impacto deseado y medirlo a lo largo del tiempo. Además, se busca identificar iniciativas existentes lideradas a menudo por pequeñas y medianas empresas que pueden no ser conscientes de su impacto. Además, la colaboración en la creación de modelos de gobernanza que garanticen la sostenibilidad de los procesos de impacto es crucial para asegurar que dicho impacto llegue a las propias comunidades a través de sus actores locales.
Valverde señaló que VIVA Idea ha llevado a cabo proyectos exitosos en los que decenas de micro y pequeñas empresas han pasado por un proceso de acompañamiento centrado en fortalecer habilidades financieras y estratégicas, así como en ayudarles a identificar su impacto, con el objetivo de desbloquear capital y fomentar su crecimiento.
En su conferencia, Valverde destacó el trabajo ejemplar realizado por Fundación IES y Big Picture en Bolivia en este ámbito, con un profundo aprendizaje sobre las acciones clave que deben llevar a cabo los inversionistas para respaldar a las PYMEs en el acceso y la gestión de capital. Entre las lecciones más destacadas se encuentra la importancia de establecer un buen gobierno corporativo que permita a las PYMEs gestionar sus operaciones de manera profesional.
Valverde también subrayó la ruralidad como una oportunidad única. Además del enfoque tradicional en tecnología, la ruralidad representa un espacio propicio para generar impacto siguiendo las dinámicas del mercado.
Se presentaron varios ejemplos en el escenario de VCILAT, como Kingo, Warmi y el programa PIEA.
Kingo en Guatemala ilustra claramente cómo generar un modelo de negocio en la ruralidad aprovechando la tecnología. Esta empresa vende servicios de energía solar mediante un modelo de prepago, con el lema de “más ventas, más impacto”.
En Argentina, se ha estado trabajando durante varios años con la Hilandería Warmi, una empresa B que, a través de su colaboración con las comunidades Coyas, ha desarrollado un modelo de negocio de alto impacto en la comunidad al valorizar el arte y el conocimiento ancestral en el mercado.
Además, la medición del índice de progreso social condujo a la idea de invertir en PYMEs de las zonas rurales de Costa Rica, ya que se evidenció que estas acciones generaban un mayor impacto después de analizar los resultados expuestos en el Índice de Progreso Social del país.