Fundación Avina, FUNDES, MarViva, VIVA Idea, Masisa y Grupo Nueva celebran veinte años de trabajo por la sostenibilidad mediante la conexión de sociedad y empresas para un futuro más prometedor para América Latina. A 20 años de la fundación de VIVA Trust, las organizaciones que somos parte del Ecosistema VIVA nos reunimos en INCAE Business School para seguir caminando en “nuestro rumbo hacia el futuro”.
Un conglomerado que combina actividades productivas con proyectos y liderazgos en sostenibilidad celebra dos décadas de innovación con un modelo que fusiona la filantropía y la empresa para impulsar el desarrollo y el progreso social. VIVA Trust ha demostrado la vigencia, relevancia y valor de sus enfoques en la región latinoamericana y el sur global.
El ecosistema pionero de VIVA Trust fue concebido, diseñado y puesto en marcha para fortalecer la capacidad de organizaciones latinoamericanas comprometidas con la innovación social, la sostenibilidad ambiental y la creación de riqueza. Hace 20 años, Stephan Schmidheiny materializó su visión de crear una organización que combinara la producción con valor agregado y alta responsabilidad, junto con la implementación de organizaciones sin fines de lucro que contribuyeran a la innovación para la sostenibilidad en América Latina.
Centenares de proyectos de sostenibilidad, como la reforestación amazónica, la conservación de ecosistemas de alto valor ambiental y social, el acceso al agua en comunidades y ciudades, el estímulo al emprendimiento social, la gestión de microcréditos y la transformación digital de micro y pequeñas empresas, han sido desarrollados por las organizaciones que forman parte del ecosistema VIVA Trust: Fundación Avina, Fundes, Marviva y Fundación VIVA Idea; esta última, su brazo para fortalecer el contrato social y gestionar el conocimiento en el ecosistema de VIVA Trust.
Para Stephan Schmidheiny, el despliegue de este ecosistema le permite que su visión e impacto trasciendan los límites de su vida natural, acercándose a cumplir el compromiso asumido en 1992, en la Cumbre de la Tierra en Río de Janeiro, y sirve como modelo de compromiso con la sociedad y el planeta para otros empresarios y filántropos de todo el mundo y, en particular, de la región latinoamericana.
La junta directiva de VIVA Trust está conformada por Roberto Artavia, Presidente; los directores Andreas Eggenberg, Heinz Hefti y Paul Rice; Christian Verling y Shannon Music en labores administrativas; y Mark Bridges, como Protector. Además, participaron en este encuentro representantes de cada una de las organizaciones que componen el ecosistema de VIVA Trust, cada una de las cuales presentó un recuento de sus actividades del último año, así como un resumen de sus principales impactos en los últimos 20 años, lanzando así el proceso formal de documentación del legado de VIVA que será publicado en un futuro cercano.
Roberto Artavia, presidente de VIVA Trust, detalló que la visión inicial del fideicomiso sigue vigente y que se mantiene el compromiso estratégico de impulsar los brazos filantrópico y productivo para impulsar la región latinoamericana, por medio de innovación constante y adaptación al cambio, hacia un futuro más sostenible, acercándose así a la visión original del fundador.
“Originalmente VIVA Trust tenía que verse como un experimento productivo y social: utilizar la fuerza de la empresa productiva, de la inversión para la creación de riqueza y la generación de empleo, para generar recursos que -a través de organizaciones innovadoras y desplegadas en áreas críticas del desarrollo- promovieran la sostenibilidad y el progreso social en América Latina. Hoy el ejemplo estratégico y operativo de VIVA Trust es una realidad”, señaló Artavia.
La región cambia permanentemente, impulsada por la alta volatilidad que existe a escala global y por naciones cuyo contexto socio-político es dinámico e inestable. Por eso, indica Artavia, también la gestión y estrategias del ecosistema VIVA han tenido cambios y evolución. “Viva Trust y sus organizaciones se mantienen relevantes, responden a los cambiantes retos del contexto, para seguir contribuyendo -con base en innovación y resiliencia- a la sostenibilidad futura de América Latina”. Además, agregó Artavia, “juntar la fuerza de la producción, con la filantropía, la sostenibilidad multidimensional y la innovación social y ambiental, permite unir lo mejor del pensamiento empresarial y del pensamiento filantrópico hacia una visión común del futuro”.
VIVA Trust se trata de cumplir lo comprometido por nuestro fundador hace 30 años en la Cumbre de la Tierra: poner la fuerza conjunta de la producción y la filantropía al servicio del cambio que necesita el mundo. “Otra decisión visionaria fue delegar la dirección del conglomerado a un grupo mixto de latinoamericanos, norteamericanos y europeos que, con visión de largo plazo y en respuesta a la gran volatilidad del contexto global y regional, han adaptado la estrategia de VIVA para mantener su relevancia y valor para la región”, agregó Artavia.
Paul Rice, director ejecutivo de Fair Trade USA y miembro de la junta directiva de VIVA Trust, que ha visto de primera mano las necesidades de las organizaciones de transformarse para alcanzar mayor impacto en sus quehaceres, se expresó así: “VIVA Trust y su ecosistema, como organizaciones individuales y como colectivo, han demostrado su capacidad de evolucionar, de reinventarse ante las condiciones cambiantes y desafíos del mundo”.
El empresario, activista por los derechos de los agricultores y economista, explica que el modelo de combinar la filantropía con la empresarialidad es un camino que fue innovador y que sigue siendo necesario. “Ese es el modelo, no solamente para el propio colectivo, sino para otras organizaciones. Encontramos mucho interés de otras organizaciones filantrópicas en aprender del modelo. El poder de VIVA Trust reside tanto en el crecimiento de su red, como en el efecto demostrativo que puede tener para otras organizaciones similares”, aseguró el líder del comercio justo.
Por su parte, Sean McKaughan, presidente de la junta directiva de Fundación Avina, ve cómo todas las organizaciones pertenecientes a VIVA Trust tienen un impacto demostrado en el terreno y un enorme potencial de crecimiento. Para McKaughan “cada vez más hay influencia de las organizaciones del ecosistema de VIVA, más allá de América Latina; en términos de innovación en políticas públicas y programas de impacto ambiental y social. Desde la Fundación Avina estamos cada vez más involucrados en las discusiones sobre el futuro del sur global.”
El actual presidente de Avina recordó que “nuestro fundador siempre nos ha impulsado para ser una organización de aprendizaje, no solamente aprender por aprender, sino aprender para hacerlo mejor. Siempre estamos cambiando, desafiándonos a hacerlo diferente, a buscar más impacto, y eso implica una evolución continua. Eso nos ha permitido ser una organización que se mantiene vigente y eso hace a VIVA Trust un grupo más relevante que nunca”, dijo McKaughan.
Para el protector del fideicomiso, Mark Bridges, el aporte en estos veinte años ha sido la innovación en cuanto a la financiación de proyectos de desarrollo en la región. “VIVA Trust ha creado una forma completamente nueva de ver la filantropía, contrario a la ruta normal de las donaciones caritativas. Para empezar, tiene los activos generados por sus inversiones productivas, que se construyen y se rigen por principios de desarrollo sostenible. Esos activos luego se distribuyen, con sumo cuidado, a otras organizaciones que siguen sus mismos principios y que integran el fideicomiso”.